Cuando oímos hablar sobre el entrenamiento de fuerza, siempre se nos vienen a la cabeza comentarios como: “… si entrenas así vas a ponerte muy musculos@”, ¨si coges mucho peso te vas a hacer daño”, etc.
Esto, junto a la desinformación y el miedo han creado una barrera enorme que nos impide acceder a todos los beneficios que nos puede ofrecer el entrenamiento de fuerza a nuestra salud.
Siempre ha estado ahí, tiene muchas definiciones, pero….
¿Qué es el entrenamiento de Fuerza?
El Entrenamiento de Fuerza son todas aquellas actividades físicas, con una intensidad suficientemente alta, que generan un gasto energético en nuestro cuerpo, lo que hace que no se quede sólo en el típico “levantamiento de pesas” sino que vas allá dependiendo de los siguientes escenarios:
- Por ejemplo, para un niño, el simple hecho de jugar en el parque, donde pueda correr, saltar, colgarse, será suficiente como actividad intensa.
- En un adulto, además de los beneficios que tendrá para su salud e independencia, el hecho de movilizar cargas con cierta intensidad, realizar actividades con algo de energía, como por ejemplo el senderismo, generará un gasto energético comparable a ese tipo de entrenamiento.
- Por otro lado en una persona lesionada, el simple hecho de trabajar alrededor de su lesión, le generará un estímulo y esfuerzo suficiente, que favorecerá su readaptación y le generará beneficios.
Entrenar la Fuerza: La clave para mejorar tu salud
Pero a día de hoy, la sociedad aún no cree que el entrenamiento de fuerza pueda ser
una herramienta escencial para mejorar tu salud, ¿por qué?
Mala información: lo que la sociedad conoce del entrenamiento de fuerza, se acerca mucho a deportes como el “culturismo”, cuyo ejemplo no se enfoca en la salud física sino en el rendimiento.
Miedos: el hecho de mover cargas pesadas (sin control, técnica correcta y supervisión), ha hecho que la sociedad le tema más a la posible lesión que realmente a obtener beneficios.
Profesionales no actualizados: hoy en día seguimos encontrando profesionales de la salud que no se actualizan con las nuevas tendencias sobre la salud, lo que provoca que la gente demonice este tipo de entrenamiento y se aleje de todo lo bueno que le puede aportar.
Todo esto conduce a que nos encontremos con una sociedad cada vez menos saludable, con más miedo a moverse, más débil, sedentaria, frágil y con una peor calidad de vida.
¿Cómo nos puede ayudar el Entrenamiento de Fuerza?
Dentro de esa niebla de dudas, desinformación y creencias hay mucha luz y beneficios gracias a este tipo de entrenamiento en los siguientes niveles:
A NIVEL FÍSICO: este tipo de entrenamiento nos genera muchos beneficios que afectan directamente a nuestro organismo:
- Reduce la diabetes, hipertensión y obesidad. La llamada “enfermedad metabólica”, cada vez mas presente en nuestra sociedad, engloba estas tres enfermedades, las cuales pueden verse reducidas gracias a este tipo de estímulo que nos ofrece el entrenamiento de fuerza.
- Reduce la la cantidad de azúcar en sangre y reduce también el porcentaje de grasa corporal.
- Mejoramos nuestra densidad mineral ósea y la calidad de nuestros huesos, reduciendo así su degeneración (osteoporosis). Esto es muy importante, sobre todo para la población adulta.
- Mejora a nivel muscular, evitando su pérdida (sarcopenia). El músculo está considerado órgano metabólico y su mejora afecta directamente a nuestra salud.
- Mejora la independencia física de la población adulta más mayor.
A NIVEL PSICOLÓGICO: sabiendo lo importante que es cuidar también nuestra salud psicológica, el entrenamiento de fuerza también ha demostrado que:
- Mejora nuestro estado anímico.
- Nos ayuda a descansar mejor.
- Reduce la ansiedad y depresión.
Por tanto, ¿cómo es posible que teniendo conocimiento de la cantidad de efectos positivos que tiene entrenar, se conozcan tan poco sus beneficios, apenas se recomiende e incluso se siga demonizando?
Lo que tenemos claro es que nadie va a venir con una varita mágica a aportarte una buena salud, tienes que hacerte responsable directo de cómo vives, cómo cuidas tu cuerpo y qué haces para sentirte bien.
¿Cómo podemos ayudarte en JW con el entrenamiento de fuerza?
En JW te ayudas a entrenar la fuerza y cuidar tu cuerpo mediante el entrenamiento personal.
Aprenderás a cuidarte, te enseñaremos cómo puedes llevar una vida saludable y estarás apoyado por un equipo de entrenadores que te harán sentirte uno más.
Por otra parte nuestros entrenamientos engloban trabajos de fuerza, motivación y sobre todo equipo.
En cada entrenamiento, sentirás vitalidad, sabrás donde quieres llegar, pero sobre todo y recibirás el apoyo necesario para desistir.
Si estás cansado@ de intentarlo, de sentir que no consigues resultados, y además sientes que necesitas tener una vida más saludable te ayudamos a ponerle solución.
Te invitamos a que pruebes una sesión de prueba gratuita para que puedas comprobar como podemos ayudarte a trabajar tu fuerza.
Si decides entrenar con nosotros y pasado el primer mes sientes que no es lo que buscaba, te devolvemos tu dinero.
¨El que no tiene tiempo para cuidar su salud, algún día tendrá que tener tiempo, dinero y paciencia para cuidar de su enfermedad.»
